Monday, May 08, 2006

Encendiendo un cigarro


Humidor

FIN DE SEMANA CASERO

Por motivos que no son importantes, creo yo, este fin de semana he estado sin salir de casa acompañado de amigos y conocidos. Mi casa es humilde pero dispongo de una estancia propia donde no molesto a nadie; aprovechando esto un amigo (amigo de verdad) y yo hemos hecho una comparación (decir cata sería una pretensión) de cigarros puros: el viernes tabaco de Vuelta abajo, Cuba; el sábado tabaco de Breña Alta, La Palma y el domingo de Cibao, República Dominicana.

Conclusión: para gustos colores y en relación calidad precio se lleva todas las comparaciones el producto nacional con mucha diferencia.

Como el tiempo nos sobraba redactamos unos pequeños consejos.

CONSEJOS PARA DISFRUTAR DE UN CIGARRO PURO.

Seleccione un sitio de confianza como lugar de compra, preferiblemente una Cava de cigarros con una buena conservación de los mismos.

Mantenga los cigarros en buenas condiciones de temperatura (sobre 18 grados C) y humidificación sobre (70% de humedad), recree un microclima tropical para la conservación de los cigarros; si los conserva en casa compre un humificador. Procure que no le de el sol directamente al humificador ni ponga el mismo cerca de una fuente de calor directa como un radiador.

Elija el cigarro más adecuado para cada ocasión, teniendo en cuenta el tiempo que le llevará su consumo. Si es la primera vez que se prueba una determinada vitola conviene catar un tamaño Corona (134 mm X 17 mm aprox.). Un cepo amplio siempre tiene un mejor tiro del cigarro que un cepo estrecho, aunque ahora la moda parece imponer un largo excesivo con un cepo pequeño: panatela larga.

Antes de encender el cigarro, elija el lugar adecuado, verifique que no va a molestar a nadie con el humo y relájese, preparándose para una intensa y placentera experiencia sensorial. Procure rodearse de una agradable compañía, como siempre que pueda, fume un cigarro o no.

Calcule el tiempo que va a precisar para fumar su cigarro y dependiendo de él el formato del cigarro, procure que se ajuste lo máximo, no encienda un cigarro de hora y media para fumárselo en media hora; elija bien el momento: evite las precipitaciones, tanto en esto como en todos los momentos de la vida. Las prisas sólo son buenas para los ladrones y los malos toreros.

Ya que hay opiniones encontradas al respecto, puede elegir entre dejar la vitola o quitarla, aunque en este caso debe tener cuidado de no dañar la capa exterior del cigarro, la capa, propiamente llamada. Cuando haya consumido una parte importante del cigarro, retire la vitola: nunca deje que se queme. Aunque yo soy partidario de quitarla desde el primer momento si el cigarro se consume en público: huya siempre de la ostentación.

Disfrute del olor del cigarro antes de encenderlo. Capte todos los matices del tabaco antes de encender el cigarro y, a ser posible, rellene sus hojas de cata y vaya guardándolas y poniéndolas al día. También puede disfrutar del grado de humedad del cigarro apretando suavemente el mismo oyéndole crujir suavemente si se le acerca al oído. Descubrirá el sonido distinto de cada cigarro y de cada estado de conservación del cigarro. Ejercite todos sus sentidos con el cigarro.

Recuerde que debe cortar el extremo sellado del cigarro, con un corte proporcional al grosor del mismo. El corte debe ser limpio, perpendicular al cigarro y lo suficientemente amplio: unas tijeras especiales o un cortador de doble filo, especialmente diseñados para este cometido, son las mejores opciones a mi entender. Huya del punzón siempre y en determinados formatos de cigarros algunos fumadores prefieren el cortador en cuña. Usted elige; al final usted es el que disfruta o sufre con la elección.

No sumerja el cigarro nunca en una copa de ninguna bebida alcohólica ni en una taza de café, hecho de muy mal gusto que distorsiona el sabor del cigarro y supone un desprecio para el esforzado elaborador del mismo. El tabaco tiene su propio sabor, degústelo.

Al encender, recuerde hacerlo con una llama corta, separada un centímetro del cigarro y girando la punta hasta que esté uniformemente encendida; nunca sumerja el pie del puro en la llama ya que si lo hace el tabaco se convertiría en carbono y su sabor a quemado permanecerá desde la primera a la última calada. Solamente entonces, cuando se forma una anilla de brasa uniforme, debe dar la primera calada. Bajo ningún concepto debe hacer el cigarro el llamado efecto “túnel”, encender el cigarro más por un lado que por otro. Si es así procure corregirse en el siguiente cigarro.

No utilice encendedores de líquido, velas o fósforos de azufre, sino encendedores de gas, fósforos largos de combustión lenta y sin azufre o láminas de cedro.

No sacuda la ceniza constantemente, hay que dejar que crezca, y además debe evolucionar de modo uniforme, para lo que conviene ir girando el cigarro en la mano. Lo mejor es que la ceniza se desprenda sola, sin forzar su caída.

Un cigarro bien fumado no se le tiene por qué apagar solo, a no ser que esté defectuoso: hay que practicar un poco para aprender su evolución y conseguirlo. Cuando lo dé por concluido, deposítelo en el cenicero para que se apague solo. Si necesitara depositar el cigarro en un cenicero que nunca toque el fondo del mismo la parte que arde, esta debe permanecer siempre en el aire. La elegancia debe acompañarnos hasta la conclusión del proceso, como siempre en esta vida; elegantes hasta en el andar.

No fume precipitadamente, sino a intervalos de un minuto más o menos para que el cigarro no se apague. No tenga prisas, nadie le va a quitar el cigarro. Disfrútelo.



6 comments:

bitdrain said...

Por fin, obtengo noticias de vuestra usía. Era un pequeño suplicio venir en busca de buenas nuevas y llevarse el fiasco del silencio, como si esa persona enmascarada se mantuviese al acecho, escondido y planeando una ardua tarea de ingeniería social.

El Lungalto said...

¿Suplicio?, ¿fiasco?, ¿enmascarada?, ¿acecho?, ¿ingeniería social?

La vida es mucho más sencilla Bitdrain, mucho más. Lo que pasa es que a veces la complicamos sin necesidad. Cree al lungalto, que ya tiene caparazón.

bitdrain said...

Esconderse, huir de los problemas, inventarse un mundo paralelo de fantasías no es un caparazón.

Hay que aprender a convivir con la realidad social que te rodea e intentar mejorarla. Dar la espalda no es una vía, no es el camino, siempre luchando contra la injustica social, la mentalidad intolerante, igualdes y demás cosas que hacen de este país un lugar subdesarrollado. Hay muchas razones por la que preocuparse, muchas por las que desear un cambio.

Todo es sencillo hasta que nosotros lo convertimos en lo opuesto. Si ves lo sencillo de las cosas, resolverás cualquier problema.

bitdrain said...

Lungalto?? Me preguntaba si algún día me pasarías tu email.

El Lungalto said...

Bitdrain, si necesitaras algo de mi no dudes que lo tendrías

Así que una minucia como es una cuenta de correo...sobra comentarlo ¿no crees?

bitdrain said...

Como sabrias entonces que necesito algo de ti, porque esconderse y huir de mi.